41.Discusión.

|
Esta vez nos mantuvimos calladas, añadiendo algún que otro comentario de cómo tocaban los chicos. Alice, yo, Mery, Frankie, Georgia, Camden, Gio y Desi. Estábamos sentadas en ese orden. Terminaron de practicar cada una de las canciones del nuevo Álbum, y dieron comienzo a algunos más antiguos de diferentes álbumes, como I’ve got you, Friday Night y unos pocos más. Dieron comienzo a la última canción que tocarían para finalizar la práctica. I’ll be OK. Perfecto. Mery se supuso a dar saltos de alegría cuando dijeron cual tocarían. Su actitud ya responde a la duda. Sí, era su canción favorita.
Dieron comienzo con los instrumentos, y pronto se les unió Danny de voz.
Dirigí mi mirada a Mery, quien tenía la vista fija en un punto. La seguí, y me encontré con la de Dougie. Volví a mirar a mirar a la castaña. 1..2..3..4.. segundos sin pestañear. Me empezaba a asustar.
-¿Mery? –La llamé, pero no hizo  caso. –Mery… -La agité un momento del brazo. –Mery.. –Otra vez.. ya me asusté. –MERY.. –La tomé ahora, agitándola más fuerte.
-¿QUÉ? –Me gritó, dando un largo pestañeo.
-Hola. –La saludé graciosa, y volví a observar a la banda.
Al parecer Dougie había visto la escena después de haber notado la firme mirada, y ahora se sonrojaba un poco, agachando su cabeza.

Habíamos decidido salir a tomar algo, tan solo para entretenernos. Nos habíamos puesto a caminar los 10. Frankie se había tenido que ir, ya que ella también tenía una banda llamada The Saturdays y tenía que practicar. Y Desi decía que se encontraba mal. Había hablando un poco con la castaña el día del picnic, pero tampoco era que fuésemos íntimas amigas.
Pronto llegamos a.. ¿la calle de ayer? Me impresioné. Me volví hacía Mery, quien estaba tan tranquila ojeando su iPhone. Me dirigí hacía ella y le eché un vistazo.
-Mamá no llama.. –Me dijo en un tono un poco preocupado.
-Ya llamará, tranquila. –Le intenté animar, frotándole un poco la espalda. –No habrá tenido tiempo hasta ahora.
-Pero no ha llamado desde que me e venido a Londres.. –Dijo aún más preocupada. Los ojos empezaron a humedecérselos.
-No, Mery, no llores. –Le pedí, limpiando con la manga las gotas que caían sobre su pantalla. –Ya te llamará, ya verás.
-¿Qué ocurre? –Preguntó Dougie, observándola, y haciendo que todo el mundo se girara a ella.
-Nada, solo que.. me duele la barriga. –Inventó Mery, sin poder evitar sonreír ante la preocupación que había mostrado el bajito.
-¿A ti también?
-Cosas de mujeres cuando se hacen mayor.. –Bromeó, y tan solo las chicas reímos.
-No lo pillo. –Confesó el pecoso, mirándonos con gracia.
-Danny, la regla.. –Le informó Giovanna.
-¿Qué regla? –Todas nos cruzamos de brazos. ¿Cómo se podía  ser tan lerdo? –Aah.. la regla. –Dijo al fin, y todos explotaron a risas.

-¡Ei chicos! –Nos llamó Camden, un poco más lejos de nosotros. -¿Qué tal este bar?
Todos lo miramos. Merda, era en el que había entrado la noche anterior con Danny. Miré al pecoso. Otro tranquilo, sin preocupaciones. ¿Es que acaso no pensaba?
-Perfecto. –Le respondió Harry, y ambos entraron primero al local, seguidos por los otros.
-¿Aquí aran baile? –Preguntó la rubia (Georgia) cogida al brazo de su novio.
-Sí. –Le respondió el.
-¿Y cómo sabes tú eso?
-Estuve ayer por la noche, cuando te fuiste. –Todos miraron al chico, suponiendo mal de el, excepto yo, claro, que me sabía la historia.
-¿Y que hacías en un bar así a esas horas? –Cuestionó la rubia, soltándose de su brazo, un poco enojada.
-Entreteniéndome. –Todos lo miraron con más cara de ¿entreteniéndote con qué o con quién?
-Danny Jones… -Le empezó a preguntar de mala gana Georgia. –Con qué te entretenías.
-Bailando. –Contestó un poco molesto. ¿Acaso su novia no confiaba en el?
-Con quién.
-Yo solo.
-Y con quien viniste.
El pecoso miró a Laia. Esta le suplicaba con los ojos que no largara nada.. pero ¿Qué había de malo? Tal vez Georgia se enfadaría con ella, o cualquier otra locura que no se le ocurría a ella ahora.
-DANNY JONES, CON QUIEN VINISTE. –Le gritó esta vez la rubia, amenazándolo con los ojos.
-¡Sólo, vine sólo!
-¡Mentira, tardaste en contestar! –Le gritó un poco más bajo la rubia, pero con la misma faceta. -¡Con que zorra me has engañado, Danny, con quien te escapaste! –Le chilló, humedeciéndoles un poco los ojos.
Un sentimiento de culpa me invadió.. ¿pero que mierdas estaba provocando por tal tontería?
-No, Georgia, no. Él no te pone los cuernos… -Le intenté calmar, pero no reaccionó como yo esperaba.
-¡Y tu que sabrás! –Estaba al borde de las lágrimas. -¡Cómo sabes que ayer no se fue con ninguna guarra que se le cruzara!
-Por que estuvo conmigo.. –Intenté explicarle. Ella hizo mueca de impresionada, pero de nuevo, sus pensamientos estaban siendo erróneos.
-Tú.. tú y Danny…? –Intentó decir.
-¡No! ¡No, yo no tengo nada con Danny, Georgia! –Le dije fuerte, para que lo comprendiera de una vez. Empecé a contarle todo, desde que le vi salir del Starburks hasta lo de los bailes en la pista.

0 comentarios:

Publicar un comentario