43.Acompañantes.

|
Pronto de enviar el mensaje, la música de End of the World sonó a mi lado. Vi a Mery por reojo sacar su móvil y leer lo que había escrito. Luego, me miro confundida, y empezó a escribir la respuesta. Segundos más tarde, lo recibí:

¿Te acuerdas cuando me dijiste que no me enfadara con Danny, que el era así? Te respondo exactamente lo mismo.

La miré extrañada. No tenía ganas de tener que perdonar yo a Danny. No era mi culpa que fuera tan idiota. Pero era cierto, ella había olvidado el asunto siendo Danny el responsable. Tal vez tuviera razón, pero yo era demasiado cabezota.


Había pasado alrededor de un cuarto de hora, o tal vez media. No se, yo estaba en otro mundo. Tan solo ojeaba mi móvil, buscando cualquier entretenimiento. Fotos, mensajes, más fotos… ya empezaba a aburrir.

-Muy bien chicoooos. –Dijo el DJ, haciendo que yo y toda la sala prestáramos atención. –El ambiente está un poco soso, ¿no creen? –Todos los de mi mesa asentimos. -¿Qué tal si animamos un poco esto?
Miramos extraños. Después de que aquel hombre, el mismo de la noche anterior, dijera las palabras, empezó a sonar música. No me pregunten cuala, no la conocía. Pero aún así, era bastante pegadiza.
Al igual que la noche anterior, algunas que otras personas salieron a bailar, unas acompañas y otra solas.
-Esperen, no. –Dijo de golpe el DJ, cogiendo el micrófono y señalando a las personas que iban solas. –Esta es para bailar con pareja, solas quedan muy mal. Así que busquen a algún acompañante, da igual si es amigo, pero se baila acompañado.
Todas las personas solteras bufaron. Algunas volvieron a sus sitios a sentarse, y otras cogieron a algún amigo que se sentaba con ellos.

Nos miramos todo en la mesa. Nos envolvía esa duda de salir o no. Yo ya tenía respuesta. No. Miré a Mery, quien iba rodando la mirada entre todos. Luego observé a Alice. Miraba fijamente a Tom, toda sonrojada, y al igual el.
-Bueeno… -Dijo de golpe Camden, estirándose en la silla. –Aquí si no da otro el primer paso nadie lo hace ¿no? –Se levantó de golpe y miró a Dougie. Éste se asustó. –Tú te vienes conmigo.
El pequeño le miró sorprendido. No decía palabra, o por lo menos por la boca. Le decía por la mirada miles de escusas por las que no salir.
-Oh, venga, no pasa nada. Entre tú y yo no hay química. Además, los dos tenemos pareja. Tan solo lo hacemos para no quedarnos aquí aburridos y viendo a los demás divertirse. –Le extendió una mano, haciendo que el rubio se sonrojara por completo. Acabo levantándose solo. –Y ahora, a todos vosotros, quítense la vergüenza y salgan.
Vimos alejarse a los dos, acoplándose en la pista. Nos volvimos a mirar. Los siguientes en actuar fueron Danny y Georgia, quienes se levantaron sin decir palabra. Un odio volvió a recorrerme. Era inevitable. Odiar a Danny también me hacía odiar a Georgia.
Pronto se levantó Facu, quien miró lleno ruborizado a Gio. La chica sonrió, sin poder evitarlo. Nos miró a todos, comunicándonos que se iba con el moreno. Mery, Jeremy, Harry, Tom, Alice y yo quedábamos en la mesa. Nos miramos entre los seis. Los siguientes fueron Tom y Alice. El rubio se levanto, más rojo que un tomate, y pidió a Alice bailar. Ella, como no, acabo accediendo, igual de roja.
-¡Pásenselo bien, pareja! –Les chilló Mery, haciendo que la castaña se girara y mirara con furia a la otra.
Cuatro éramos. Jeremy se levantó, un poco torpe, tropezando con las patas de la silla. Después de estar apunto de tirar su copa y llevarse el mantel con él, pudo levantarse sin accidentes. Miró a Mery, quien ella se hacía la despistada, mirando a otro lado.
-Mery.. –Le llamó Jeremy. Ella se giró y le miró. -¿Quieres…? O sea, ¿quieres bailar? –Dijo algo tímido, señalando con la cabeza a la pista.
-No, no me encuentro demasiado bien. –Le contestó. La miré sorprendida. –Saca a Laia, a ella si le apetecerá. –Esta vez cambié mi mirada, abriendo todo lo que podía mis ojos.
-Mmm… -Dijo el, mirándome con el ceño fruncido. –Está bien.. ¿te vienes?
Di un largo suspiro, mientras rodaba los ojos. Acabé asintiendo, levantándome y haciendo fuerza sobre Mery para joderla un poco.

0 comentarios:

Publicar un comentario