62.Vicky.

|
-¿Qué, eh? –Dije a los tortolitos en voz alta, empezando a levantar y bajar las cejas rápidamente. –Momento embarazoso, ¿no? Que bonito…
-Tú cállate. –Me mandó Mery, acercándose de nuevo al banco e intentando sentarse. Por desgracia, Tinky había ocupado su sitio. –Me cae mal el perro…
-Pues yo lo adoro. –Dije bien contenta, cogiéndolo y poniéndolo en mis piernas para dejar que Mery se sentara. –Me trata mejor que tú y todo.
Recibí un puñetazo de parte de Mery. Ella seguía ruborizada, mirando al suelo y pensando en sus cosas. Tinky saltó de mis brazos para acoplarse en los de Mery. Ella alejó su cabeza al notar al animal sobre ella, pero no pudo negarse al perro. Tinky le lamió la cara entera, con una lengua realmente larga.
-¡Qué asco de chucho! –Gritó, empezando a secarse la cara con la manga.
-En realidad te ha dado un besucón.
-O te vayas callando o te juro que me desahogo contigo. –Me amenazó Mery, mirándome con furia y tirando al perro de nuevo sobre mí. –Me voy a dar un paseo. ¿Alguien se viene?
-Yo. –Dijo Dougie al momento, adelantándose a la contestación de Jeremy.
-Mejor me quedo aquí.. –Rectificó la castaña, volviéndose a sentarse.
El bajista adoptó una cara de tristeza. Volvió junto a los otros dos, quien pronto se les unió Jeremy. Doug le miró con rabia. Había sido su amigo, pero ya sabía los sentimientos que tenía hacía Mery.. pero a el no le debía de importar. Dougie no la quería, el amaba a Frankie. ¿O no?



Después de varias horas de risa de parte de todos, aquello ya empezaba a aburrir. Empezaba a atardecer, y ya que aquello se había vuelto soso, buscamos otro entretenimiento.
-Vamos a mi casa. –Propuso Danny, con votos a favor de parte de los chicos y en contra de las chicas. –Mayoría de votos a favor..
-Hay los mismos votos. Cinco en contra y cinco a favor. –Criticó Alice.
-Tinky vota a favor. –Dijo con una sonrisa Jones el pecoso, guiñándole un ojo.




Media hora más tarde, llegamos a la casa Jones. Nada más entrar, encontramos el motivo por el que el nos había invitado tan gentil a su casa. Estaba patas arriba, sin limpiar de la noche anterior.
-Ups… -Dijo irónico al ver nuestras caras impresionadas ante el desastre. –Tendremos que limpiar…
-No vamos a limpiar todo esto ni en broma. –Critiqué yo, mirando la cantidad de vasos, cigarros y demás cosas que había por el suelo.
El puso cara de cordero degollado. Todas nosotras apartamos la vista enseguida de el. Tenía esa mirada que convencía a todas.
-No vais a limpiar nada, tranquilas. –Dijo una voz al fondo, y miramos allí.
Una chica con pelo negro y rubio, piercing cerca del labio y unos ojos azules claros, los mismos que los de Danny, se acercaba a nosotras. Era Vicky, su hermana. Había oído hablar de ella antes, pero nunca habíamos hablado. La verdad era que, la primera impresión que tuve sobre ella la primera vez que la ví, fue que era un poquito rara, al igual que su hermano.
-Soy Vicky, la hermana de Danny. –Nos saludó, dándonos dos besos a todas. –No limpies esto, lo tiene que hacer el. Es su fiesta.
-Vicky, no te metas. –Le reprochó su hermano divertido. -¿Qué haces aquí?
-También es mi casa, ¿no? –Sonrió a Danny. Tenía sus mismos dientes. –Me apetecía hacerle una visita a mi hermano, pero cuando vengo nunca estás.
-Si vienes por el día jamás me encontrarás.
-Cierto. –Dijo esta vez Tom, metiéndose por en medio. –O hemos salido, o estamos en la discográfica o están todos en mi casa.
-Es de suponer… -Se volvió de nuevo hacía nosotras y nos invitó a pasar. –Venga, vamos a conocernos. Dejemos a Danny aquí para que lo limpie todo.
-¡Pero échenme una mano! –Pidió el pecoso, mientras nosotras entrábamos al salón por los empujones de Vicky.
Nos sentamos en el sofá. Aquella sala parecía estar un poco más limpia. Vicky nos miraba sonriente a todas, con la misma mirada con la que solía hacerlo Danny. Eran clavados.
-Camden… -Preguntó al momento. -¿No me presentas a tus amigas?
-Oh si, lo siento. –Cogió aire y nos miró pícaramente. –Estas son Alice, la novia de Tom.
-¡Es mentira! –Chilló ella, dándole un buen golpe a la pelirroja y sonrojándose por completo. –No soy novia de Tom.
-A mi llámame Desi.
-Yo soy Laia.
-Y yo, la mejor de todas, la mandamás… -Empezó a presumir Mery, haciéndose la importante.-… Yo soy Mery.

0 comentarios:

Publicar un comentario